Por: La Zarzamora
Don Carlos Valdebenito, padre de Julián Valdebenito uno de los 81 presos muertos en la masacre de San Miguel, falleció este lunes a causa de un cáncer a la vesícula, tras años de lucha en búsqueda de justicia para su hijo, la cual nunca llegó. En estos momentos está siendo velado en la Pintana y sus funerales se realizarán mañana en el Cementerio Parque Cordillera, comuna de la Florida, donde decanzará junto a los restos de su hijo Julián.
Don Carlos fue uno de los familiares de los 81, que participó en la obra de teatro «Torre 5», junto a la corporación Coarte, obra que relataba la masacre en la cárcel de San Miguel y que fue presentada en distintos teatros de Santiago y otras ciudades, llegando también a otros países como Bolivia y Argentina. Tan destacada fue su participación, que Jaqueline Roumeau, directora de la corporación, lo seleccionó para ser parte de una nueva obra de teatro Enrique Tercero.
Don Carlos era músico de profesión y vivía población San Rafael, en la comuna de La Pintana, Santiago. Desde el incendio, que le quita la vida a 81 presos de la cárcel de San Miguel (entre ellos su hijo), luchó incansablemente por encontrar justicia, una justicia que no llegó y que mantiene en la impunidad a todos los gendarmes responsables del terrible desenlace del incendio ocurrido el año 2010. «Lo acompaño durante toda su condena, visita a visita, junto a su compañera Manuela Martinez» afirman desde 81 Razones.
Hoy las familias de los 81 fallecidos están siendo afectadas por diversas enfermedades, producto de largos años de tristeza y estrés provocados por el silencio, la indiferencia y la desfachatez de Gendarmería y los gobiernos de turno. Don Carlos era uno de ellos, hoy víctima de un fuerte cáncer, enfermedad que también afecta a su esposa Manuela Martinez.
A partir de esta nueva pérdida desde 81 Razones emitieron el siguiente comunicado:
Los Gremios de gendarmería Anti Derechos Humanos.
Sr Director Nacional de Gendarmería de Chile.
Gremios de carceleros, funcionarios públicos del estado de Chile.
Nos dirigimos a ustedes como organización 81RAZONES que promueve y defiende los DDHH de las personas privadas de libertad, en memoria, lucha y búsqueda de justicia por nuestros 81 compañeros que perdieron la vida en sus manos y funciones un 8 de diciembre del año 2010 en la cárcel de San Miguel, causa aún impune sin responsables.
Poco ya nos impresiona el comportamiento aberrante e indecente, de la mayoría de los gremios «profesionales» que componen la institución de gendarmería, animalitos que berrinchan cada vez que le tocan a uno de ellos, por que bajo mandato legal y en orden de la ley, apalean a los presos hasta casi matarlos, les cortan los dedos a golpes, rompen y destrozan lo que ustedes no son capaces de construir dignamente «DAÑO FISCAL», ingresan kilos de drogas y elementos prohibidos a las cárceles del país, se roban millones de dólares en los economatos, venden beneficios intrapenitenciarios en altas sumas de dinero, trafican armas, planifican montajes y procedimientos de película para demostrar sus eficacias ante los medios de TV, eliminan a todo colega que intenta ser honrado y honesto, roban parte de las encomiendas y los alimentos que entrega el estado para alimentar a los presos y presas e incluso a ustedes, crean y autorizan celdas Vip por cambios ostentosos y/o premios económicos y luego ustedes mismos denuncian que no saben cómo se crearon estas celdas hoteles delante de sus propias narices.
Hablan del crimen organizado en las cárceles cuando ustedes señores gremialistas son los primeros que permiten y abren las puertas a estos delitos internos, dentro de una de las «mejores y más seguras instituciones del país».
No son capaces de atender a un preso enfermo porque son horas de encierro o lo mejor es darle un paracetamol, así no dañan el bolsillo del papi fisco o estado, que tanto hay que cuidar.
Que TERRIBLE molestia causó un informe del DEPARTAMENTO DE DERECHOS HUMANOS de su misma institución, cuando ese documento sólo habla del respeto a la ley y la eliminación total de cualquier comportamiento ILEGAL de sus mismos funcionarios.
Cómo entender que Christian Alveal, ex director naciomal de Gendarmería, les siga penando en sus cerebros, cuando salió de la institución con 18 querellas sobre sus hombros por diferentes delitos, violaciones laborales a sus propios colegas y graves ATROPELLOS a los DDHH de las personas privadas de libertad.
¿Por qué avalar la tortura señores de los gremios? ¿se han dado el tiempo de leer la ley que rige actualmente en Chile?…
¿O ustedes no irían con su barrita brava a protestar en las afuera de alguna cárcel si a alguno de sus mismos colegas que estan hoy detras del candado los tortura un mismo colega que llega ebrio, drogado o de mal humor encañado? ¿No se han puesto a pensar que viven en el viejo refrán o dicho, la casa del jabonero? donde varioooos de sus colegas de gremios estan hoy cuidando sus baldosas por graves delitos y violaciones a los DDHH, pero aislados de la población penal, porque ustedes jamás serán choros, no les da la ficha ni el cupo, aunque se pesquen a tajos con los presos como lo ocurrido en Santiago 1, cuando celebraron y casi condecoraron a uno de los suyos por utilizar la cuchilla para pelear con los internos.
Aunque se salgan con la suya luego de esos extraños C,H,I en coro protestantes, ustedes están del lado del verdadero crimen, el crimen del estado, ese que viola los derechos humanos de los ciudadanos y los presos, a pesar de ser capacitados para defenderlos, en la desobediencia racista discriminatoria, sabemos quienes son los que mandan a gasear, apalear, torturar, castigar, hostigar, montajear y hacer daño a las personas que deberían cuidar, resguardar y aportar para sus procesos de reinserción social, sabemos sus nombres, cargos y lugares de trabajo, no lo digo para que se sientan amenazados, si no para que sepan que los venimos siguiendo por años y no seremos nosotros quizás los que hagan justicia y los vean caer, si no será la vida, el destino, la razón, el amor la fraternidad y esa SOLIDARIDAD que tanto temen, cuando nos ven unidos, por que saben a quien torturar, por que a nuestros compañeros solidarios anticarcelarios no los tocan, les tiembla la mano, saben que no saldrán con un golpe de vuelta si los van a torturan como procedimiento normal.
Hoy se nos fue de este mundo un nuevo padre de un hermano de 81RAZONES, murió sin justicia, sin ayuda social ni gubernamental, sin ayuda humanitaria de parte de ningún organismo del estado, murió por la indolencia y olvido, por esa misma maldad que aplicas cuando golpeas a un ser humano en orden de la ley, cuando lo dejas morir y cuando lo dejas mas preso cambiando la ley o cargando algo para que no postule a beneficios, esa ley de la vida que se te viene a la mente cuando estas cenando con tu familia o cuando vez la mirada de un niño que ve en tu aura oscuridad, maldad y podredumbre.
Nuestro hermano de 81RAZONES hoy está siendo despedido con toda su gente, lleno de amor, lleno de gestos maravillosos de hermandad, alegría, a pesar del dolor.
Que se borren todos los informes que hablan de DDHH, que siga el crimen de estado imperando, mañana tendrán la autorización de matarnos a todos y desatarse como jauría de la dictadura, así que preparen sus armas, colmillos y tanquetas, que nosotros ya estamos preparados para nuevamente enfrentar a los criminales y asesinos sean del gobierno que sea y se vistan del uniforme que sea, ya no tenemos miedo, por esas razones los dejamos a todos cordialmente invitados y citamos a reunión extraordinaria en las dependencias de la dirección nacional de gendarmería de Chile, cuando ustedes quieran…
No olvidar llevar lápiz y papel para tomar nota y apuntes, que hablaremos sobre los Derechos Humanos, eso que tanto les pesa y duele hablar.
PD: Se recibirán acopios de alimentos y útiles de aseo para nuestros hermanos encarcelados y para los suyos también SEÑORES GREMIOS.
Atte: Familias 81Razones.
A 12 AÑOS DE LA MASACRE DE LA CARCEL DE SAN MIGUEL, EN LAS CARCELES CHILENAS SIGUEN TORTURANDO.
Cuando tu te mueras serás un Tío Noli, solo en la carroza al cementerio.
Aupa, Newen.