El pasado sábado 31 de octubre, Valdivia fue estremecida por un nuevo ataque patriarcal, esta vez se trató del crimen de trans odio de Vicente González Lorca, un chico trans de 25 años quien provenía desde el Tabo, V región.
El repudiable hecho sucedió durante la madrugada del sábado 31 de octubre, en un sitio ereazo entre las calles Simpson y Lynch, en donde un hombre secuestró y procedió luego a ejercer un ataque de violencia correctiva contra Vicente, el cual finalmente terminó con su vida.
El caso quedó a manos del fiscal Carlos Bahamondes, quién decretó prisión preventiva para el único imputado por el macabro hecho, Víctor Hugo Abarca Díaz de 58 años. Sin embargo, la acusación sólo comprende hasta el momento un «robo con homicidio consumado«, imputación que irrisoriamente deja fuera el motor de trans odio en el caso e ignorando que el cuerpo de Vicente presentaba rasgos de una agresión sexual de carácter correctivo, lo cual sigue siendo materia de investigación.
El crimen de Vicente dejó también en evidencia la necesidad urgente de hacer respetar las identidades de las personas trans, tanto en el ámbito jurídico, en el mediático, así como en las mismas organizaciones que difundieron el caso, siendo primordial para acabar con estos crímenes, que se reconozca social y comunicacionalmente la existencia trans.
Para esta tarde se ha convocado a una velatón, en memoria de Vicente, en la cual se espera contar con gran convocatoria.
Desde Colectiva Transforma nos envían el siguiente comunicado:
Estimades, a continuación dejamos nuestra declaración como organización:
«Como Colectiva Transforma manifestamos nuestra preocupación ante el creciente número de ataques de odio con resultado de muerte hacia las personas de la comunidad LGBTIQA+. Asimismo, repudiamos el mal manejo comunicacional que se ha hecho de la defunción de Vicente González Lorca. Desde que se ha comenzado a difundir la noticia de su deceso, se ha insistido en no respetar su nombre social ni su identidad de género.
Las personas trans merecemos que se nos respete incluso después de nuestra muerte. Esto muestra una vez más como las personas trans no tenemos acceso a un reconocimiento social de nuestras experiencias y vivencias, las cuales se ven negadas y silenciadas sostenidamente.
Esperamos que los medios de comunicación comiencen a actualizarse y desarrollar protocolos concretos en los que puedan trabajar y así no seguir contribuyendo a las invisibilizarían de nuestra comunidad»
El crimen de Trans Odio de Vicente forma parte de una serie de ataques patriarcales en Valdivia, situación que preocupa y pone en alerta a toda la zona.-