Por: La Zarzamora
Jill Phipps nació un 15 de enero de 1965 en Hillfields, un suburbio de Coventry, Inglaterra y desde pequeña expresó su amor por lxs animales, adoptando y cuidando a lxs que encontraba en situación de abandono. Era la menor de 3 hermanxs y luego de que unx de ellxs dejara de comer carne, su madre y por consecuencia, toda su familia, adopta un posicionamiento antiespecista, creciendo bajo esta comprensión del mundo.
Jill va creciendo y paralelamente el movimiento de liberación animal se agudiza, irrumpiendo en espacios de caza, peleteras, y otras industrias de muerte con potentes acciones directas, destrucción de infraestructuras, sabotages incendiarios y también el registro audiovisual del sufrimiento de lxs animales ahí secuestradxs. En este contexto comienzan a conformarse colectivos como HSA y luego Band of Mercy, que utilizaban tácticas de sabotaje, este último comenzaba su actividad atentando con un sabotaje incendiario a las obras de construcción de un laboratorio en Milton Keynes.
Jill va a su primera protesta a los 11 años junto a su madre y hermana, era una manifestación contra una granja peletera en Coventry. Ese mismo año (1976) se conformaba el Frente de Liberación Animal, entre la efervescencia social rebelde contra el sistema, que se desarrollaba en las calles y también en la música con una fuerte irrupción del punk.
A los 16 años Jill deja la escuela y comienza a fortalecer su compromiso de lucha ante diferentes opresiones del capital, conoce el feminismo y el movimiento antinuclear, pero sin duda alguna lo que le caló más hondo fue luchar por la liberación animal. Es así como en 1982 Jill es detenida por la policía, tras participar de una protesta contra el criadero de zorros de la granja Cocksparrow, en Lea Marston (Warwickshire), esta manifestación era parte de una larga campaña por el cierre de dicha granja, campaña de la cual Jill y su familia formaron parte activa.
Aquel día se conglomeraron cientos de personas, muchas de las cuales pudieron entrar y hacer destrozos, lo que se sumó a una serie de sabotajes y liberaciones de zorros llevadas a cabo por el ALF en la clandestinidad. La lucha por el cierre continuó por años, hasta que finalmente en 1987 tras multitudinarias manifestaciones y la liberación de 200 zorros realizada por el ALF, se logra el cierre definitivo.
En 1984 Jill, su madre y su hermana, nuevamente son detenidas junto a otrxs manifestantes, tras una manifestacion e irrupción en los laboratorios de Unilever, en Bedfrodshire, convocada por la Liga por la Liberación Animal del Este (EALL). Fueron procesadas bajo el cargo de conspiración para cometer robo con fuerza, quedando en libertad bajo fianza a la espera del juicio. Durante la espera de juicio Jill fue madre, lo que impidió que ingresara a prisión, sin embargo su hermana y madre fueron condenadas a 6 meses.
Tras el nacimiento de su hijo, Jill decide realizar actividades más seguras, de relacionadas al financiamiento para liberación animal, y recorre Inglaterra en un mini bus buscando aportes en las calles, ayudando en la conformación de una red, creando espacios de información sobre la explotación animal y asistiendo a diferentes manifestaciones locales.
En 1994 la compañía naviera Phoenix Aviation, obtiene autorización para transportar terneros vivos desde Coventry hacia Holanda. Esto provoca un repudio generalizado por lo que se produce gran presión social que logra evitar los primeros vuelos. Tras ganar un juicio que permitió la continuidad de los vuelos, la compañía comienza a realizar 5 vuelos diarios, cada uno con 190 terneros vivos.
Esto inmediatamente es contrarrestado masivamente por activistas de la liberación animal que bloquean el trayecto con sus propios cuerpos, evitando por todos los medios el traslado de los animales. Esta nueva estrategia comienza a ser replicada en cada localidad afectada.
El 1 de febrero de 1995 Jill, junto a su madre, hermana y más de 30 manifestantes realizan un bloqueo para evitar la tortura y muerte de los animales transportados. Siempre con la protección de la policía, la nefasta empresa cuenta con la complicidad de los defensores del capital, quienes dan la orden a los camiones de no detenerse por ningún motivo.
Jill junto a sus compañerxs logran romper la fila policial y aferrarse a uno de los camiones para encadenarse e impedir el destino impuesto por la industria. En ese momento, según los testigos, un policía señaló al chófer Stephen Yates, seguir su marcha, entonces el camión embiste a Jill, quien es fuetemente arrollada, quedando tendida entre las ruedas y falleciendo finalmente durante el traslado al hospital.
La tristeza, rabia y conmoción que genera su asesinato, motiva a cientos de activistas a seguir bloqueando y mantenerse en un campamento constante para evitar la continuidad de los vuelos. La masividad y extensión en el tiempo de las movilizaciones, desgastaron a la policía y también a la empresa, que comienza a reducir los vuelos, hasta finalmente irse a la quiebra. Años más tarde el dueño de esta, es acusado de tráfico de armas a Sudán y tráfico de cocaína.
-Estamos arriesgando nuestras vidas por esto, y seguiremos haciéndolo hasta que lo hayamos parado- sostiene Jill en una breve entrevista durante los bloqueos.
-¿Incluso si alguien resulta herido?- pregunta un periodista.
-Sí, y probablemente alguien resulte herido- responde Jill.
Jill obstruyó firmemente el paso del camión, su objetivo era boicotear una de las industrias más destructivas, asesinas y poderosas del mundo.
Hoy recordamos sus acciones y vida por la liberación animal!!
Destruye el especismo
Liberación animal, de la tierra y humana.
Fin la industria cárnica y a toda explotación animal.
Jill Phipps presente!!!!