Por: La Zarzamora
El próximo lunes se fijaría la fecha definitiva de la segunda discusión para que el Senado vote el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico un nefasto acuerdo económico que involucra a países de la región de Asia Pacífico, y que afecta gravemente la autonomía de las comunidades encerradas dentro del estado $hileno. La amenaza continúa y tiene los votos asegurados.
Mientras desde el gobierno de Boric, enfatizan que siguen tramitando las llamadas «side letters», tal vez creyendo o buscando hacer creer, que mitigarán los efectos del tratado por medio de estas micro negociaciones con los países firmantes, las cuales tienen por objetivo de alguna manera «resguardar los intereses nacionales» ante demandas de firmas privadas, en lo que ellos llaman «Resolución de Controversias».
El Sistema Internacional de Resolución de Controversias «permite a los inversores extranjeros demandar a Estados en foros arbitrales internacionales si comprenden que una política pública afecta de cualquier modo su propiedad o su ganancia. Dicho mecanismo está incluido en el Anexo B del Capítulo 9 sobre Inversiones del TPP11, y se ha usado contra países latinoamericanos en 327 ocasiones, según un reciente informe de TNI» afirman desde Chile mejor sin TLC.
Al tratarse de un acuerdo integral estas negociaciones entre paises no modifican el fondo del TPP11, y su efectividad es limitada y relativa. La gravedad de la puesta en curso del tpp11 y el daño a las comunidades no desaparece, especialmente cuando estas cartas laterales se lleguen a negociar con potencias como Japón. Hay que tener presente que las afectaciones del tpp11 no involucran solamente lo estatal sino que abarca todo el ámbito comunitario afectando su autonomía.
Segun afirmó la agrupación Chile mejor sin TLC: «La cantidad de temáticas abarcadas convierten al acuerdo en una suerte de pulpo que atrapa todo aquello del espacio público que pueda ser privatizado, dando libre acción a las empresas, fortaleciendo el modelo exportador de materia prima, y restringiendo la acción de la política pública en todos los sectores mencionados»¹.
Para colmo, este proceso jamás ha sido consultado a los pueblos indígenas, que serán otra de las comunidades directamente afectadas por los aspectos agrícolas y culturales del tpp11, consulta que el estado de $hile está obligado a realizar por medio del Convenio 169 de la OIT que tanto evade respetar.
Las comunidades indígenas y rurales que mantienen un sistema de conservación y reproducción del alimento nativo, que han resguardado y multiplicado semillas de alto valor nutricional, sin contaminación agrotóxica, podrían verse terriblemente afectadas con la radicalización de las medidas de control y patentación de semillas. En el Füta Trawün de Weketrumao en Chilwe las comunidades declararon su molestia hacia los proyectos extractivistas y rechazaron categóricamente el tratado:
«Hacemos un llamado a los territorios indígenas y organizaciones sociales, usuarios de internet , agricultores y a toda la comunidad en general a informarse sobre la implicancia de este tratado ya que de ser aprobado nos privará incluso de la soberanía alimentaria de nuestros pueblos originarios»
Comunicado firmado por más de 16 comunidades de Chilwe.
Sin embargo pese al repudio masivo de organizaciones y comunidades a la instauración del TPP11 e incomprensiblemente luego de un proceso de rebelión contra la estructura política, nos encontramos dependiendo nuevamente de una desición que tomaran aquellos que en algún minuto fueron expulsados de sus puestos de poder por medio de la protesta, los mismos que desde sus privilegios determinarán la manera en que los capitales extranjeros manejen y controlen lo que ellos llaman recursos y que nosotrxs conocemos como vida.
«Nos encontramos en medio de una contienda épica, la contienda entre los derechos de la Madre Tierra y los de las multinacionales y los estados militarizados que, mediante cosmovisiones y paradigmas obsoletos, aceleran la guerra contra el planeta y las personas»
Del porqué escribimos este libro juntas. Vandana Shiva y María Mies
¹Carta de Chile mejor sin TLC dirigida a la canciller Antonia Urrejola, una de las impulsoras del tratado.