Por La Zarzamora
Agosto tiene memoria negra. Esa indispensable para quienes se plantan en la tierra y deciden actuar contra el dominio. En la memoria algo del pasado se funde con el presente, más aún cuando la memoria deja de ser palabra y se manifiesta certeramente en la acción insurreccional o en un gesto solidario concreto. Así la memoria negra logra traspasar las censuras del poder, y avanza sin fronteras temporales ni generacionales.
También llegan momentos en que quienes mantuvieron viva esa memoria negra, pasan a ser parte de esta. Y en difusos espacios temporales convergen nuevamente el presente, el ahora, los recuerdos, la memoria.
Hay momentos en que la vida y la muerte, desde la comprensión binaria se desvanecen, creando un instante en que nada y todo existe.
¿Cómo habrán vivido ese agosto de 1927 quienes presenciaron el cobarde y detestable proceso que terminó en el fusilamiento de Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti?
Pese a las acciones insurreccionales de compañerxs, manifestaciones y peticiones de todo tipo por su liberación alrededor del mundo, fueron electrocutados por Estados Unidos el 23 de Agosto de 1927 a las 00 hrs.
«A su violencia debemos responder con nuestra violencia: la venganza. A su instrumento infame que ha quemado los cuerpos de Sacco y Vanzetti debemos oponer nuestros instrumentos vengadores» decía Di Giovanni en el Culmine, ante la ejecución infame de los compañeros. También lo concretó: voló el monumento a Washington y la Ford motor company de Buenos Aires…
La separación física con tantxs compañerxs, es una experiencia que se va llevando a cuestas, solo salirnos de las comprensiones impuestas puede sanar las ausencias, aprender a vivir con ellas.
El año pasado dos queridxs compañerxs dejaron su presencia física, Luciano Pitronelo y a los días Belén Navarrete, ambxs cercanxs a gente muy querida, compañerxs de ideas, activxs y solidarixs con nuestrxs compañerxs en prisión.
Tras ese golpe, del impacto, comenzaron las acciones. Los lienzos y rayados con sus nombres, barricadas y panfletos con sus rostros, salidas incendiarias y otros chem iban nuevamente fusionando presente y pasado reciente, en acciones violentas, en fuego, en el lienzo, en el rayado.
Y así como recordaron e hicieron presentes otrxs, hace casi un siglo a sus compañerxs, confrontando las posturas cobardes y pacifistas, hoy las acciones cumplen misma función.
Belén Navarrete vive en el estallido que voló la puerta del laboratorio abbot recalcine, la noche tormentosa del 19 de mayo de este año. Las células que llevan su nombre, la hicieron presente en un acto de venganza por la distribución de pastillas anticonceptivas que obligaron al embarazo a un número aún indeterminado de mujeres y cuerpos gestantes.
En cada gesto, en cada acción, la memoria y la acción, mezcla que fusiona el presente y el pasado, en agosto cuando el renuevo de los árboles vuelve a aparecer, cuando los botones estan apunto de estallar, la memoria negra abre el portal donde hacemos presentes a nuestrxs compañerxs…cada gesto… cada acción.
Que las acciones diluyan el velo que separa la vida de la muerte
Belén Navarrete y Tortuga viven en la acción insurreccional
Por nuestrxs compañerxs que trascendieron el plano terrenal.
Agosto Negro 2025