Por: La Zarzamora
Diversas comunidades y cuidadoras de semillas nativas orgánicas, denuncian que personas vinculadas tanto a empresas de manipulación genética y patentación de semillas como del gobierno, han intentado mediante manipulaciones y engaños, obtener semillas limpias e información sobre estas mediante distintas estrategias, entre las que cuentan confusas reuniones e información falsa, esto en el contexto de un cuestionado catastro nacional de semillas que se desarrolla coincidentemente luego de la aprobación del TPP11.
Las comunidades, cuidadoras de semillas y pequeñ@s agricultor@s encendieron las alertas luego de extrañas maniobras que personajes ligados a transnacionales como Bayer, Monsanto y al gobierno aparecieran en Atacama, el Maule y Wall Mapu, buscando información y la obtención de semillas nativas. Esto explican, sería parte de la estrategia para conformar un catastro nacional, sin embargo, comunidades denuncian que el encargado de realizar este supuesto catastro está ligado a Bayer y Monsanto
El Colectivo Ecológico en Acción, manifestó que están de manera soterrada preparando la reaparición de la cuestionada y repudiada ley Monsanto, impulsada ya hace años por Ena Von Baer. Esto sería debido a que la implementación del TPP11, exige la ratificación del convenio Upov91, el que a su vez obliga al estado de $hile a generar una «legislación nacional para la patente de semillas», uno de los objetivos que buscaba la nefasta ley.
«Hace años atrás como colectivo junto a otras organizaciones asistimos a una reunión con el subsecretario de agricultura del gobierno de Bachelet donde se nos presentó la «nueva ley monsanto» que estaban preparando, y lo que proponían es lo que están empezando a hacer elaborar un catastro de semillas y la creación de un banco a cargo de algún organismo estatal, pero lo graciosos es que no se contaba con fondos para ello así que el catastro y banco de semillas terminaría a cargo de alguna empresa o institución privada, es decir a la larga la semilla terminaría en manos de empresas como Monsanto como ya sucedió hace unos años cuando el INIA entregó a ANASAC propiedad de Monsanto el catastro de semillas que disponían».
Colectivo Ecológico en Acción
De igual manera, hace pocos días la cuidadora de semillas Zunilda Lepin de Temuco, envió una carta pública a Gabril Boric, en la cual denuncia que en una revista del INIA (Instituto de Investigaciones Agropecuarias y parte del Ministerio de Agricultura) sobre los bancos de semillas, el Ministro Esteban Valenzuela, cita su nombre advirtiendo que las semillas nativas «tienen menor rendimiento», aludiendo a que la cuidadora realiza esta afirmación, ante lo cual Zunilda, alertada por las comunidades, reaccionó rápidamente desmintiendo este engaño:
«Quiero desmentir lo
Zunilda Lepin. Carta a Gabriel Boric.
que se dice de mí, pueden ver muchas entrevistas y reportajes que se han hecho de mi persona y decir que yo alguna vez haya dicho que la semilla tradicional es menos productíva es una gran mentira».
El trabajo de Zunilda como cuidadora de semilla limpia ancestral y orgánica, es reconocido ampliamente por el mundo campesino y hortícola, siendo ella una de las defensoras de la semilla nativa, fomentando siempre la agricultura familiar local y destacando constantemente, los beneficios del alimento saludable y rico en nutrientes que surge de la semilla ancestral.
«Ahora quieren venir a enseñarnos cuando nosotras llevamos décadassembrando y compartiendo la mejor semilla de todas, la tradicional, la de nuestras abuelas, esas con las que nos criamos sanas. Las de ahora además de ser debiluchas nos enferman, el tomate ni siquiera tiene sabor, tampoco el maíz, ni la albahaca ya tiene aroma. En cambio nuestra semilla antigua resistía todo, y con guano produce más que las nuevas, que hay que llenarlas de fertilizantes y venenos que aparte de dañar nuestra ñukemapu nos enferman».
Zunilda Lepin. Carta a Gabriel Boric.
En la misma carta, denuncia que uno de estos siniestros personajes visitó hace poco tiempo un trafkintu (instancia de intercambio de semillas orgánicas) en Melipeuco, lugar en el cual fue increpado y expulsado por las cuidadoras presentes.
Uno de los infiltrados identificados es Ricardo Pertuzé, Ingeniero Agrónomo, experto en Genética Vegetal y profesor del Depto. de Producción Agrícola de la Facultad de Cs. Agronómicas de la Universidad de Chile, en donde dicta clases de pregrado y postgrado en producción de semillas, horticultura, mejoramiento vegetal y genética. Según los datos de su propio currículum Pertuzé además, participa de proyectos de mejoramiento hortícola para la agroindustria.
Las comunidades y organizaciones de protección de las semillas, afirman que este docente e investigador, estaría vinculado a empresas como Bayer y Monsanto, ambas reconocidas y repudiadas mundialmente por apropiarse de semillas nativas en lugares como México y la India (entre muchos más), y de devastar los territorios con monocultivos transgénicos ocasionando graves daños a la salud humana y a la tierra.
Ante esta alerta y el grave peligro que representan estas prácticas de usurpación de la semilla nativa, Zunilda Lepín expresó:
«Aprovecho de llamar a todas mis ñañas, mis lamuen, a las cuidadoras de semillas, a las huerteras de campo o de ciudad de todo el país a no entregar su semilla a ninguna institución, hasta que no nos digan qué semillas tienen guardadas y nos las devuelvan para sembrar libremente como siempre lo hicimos y como debe seguir. Ahí están las semillas de nuestras abuelas, ellas se fueron a la tumba sin recuperarlas, nosotros debemos luchar por su legado».
Zunilda Lepin. Carta a Gabriel Boric.
El llamado es a mantener la alerta, a no facilitar semillas orgánicas nativas a ninguna persona o entidad sospechosa, a denunciar públicamente cualquier situación de estas características y a seguir resguardando y reproduciendo las semillas ancestrales, que proporcionarán nuestro alimento futuro.-
Descarga carta de Zunilda Lepín